Historias De Un Jugador in-Diferente

  • Autor de hilo DeletedUser43660
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DeletedUser43660

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Año 479 d.c.
Erase una tarde lluviosa en un poblado desolado, cerca de una region boscosa y un pequeño lago. Lugar cuya gente decía que a lo lejos podías observar un par de montañas que saludaban al sol cada amanecer y separaban a ese rincón de region, con el resto del mundo... Aunque claro, eso ya se lo dejo a vuestro criterio.
No era un pueblo fantasma, no no no, nada de eso, era habitado por los "bárbaros", gente sencilla, humilde y en cierta medida ignorante, donde solo veían 3 vocaciones presentes y futuras entre sus vidas. La recolección de madera durante el día y la noche para hacer crecer sus pequeñas edificaciones; la exhaustiva excavación para extraer hierro para el uso cotidiano, o el ensuciarse en la tierra para conseguir el barro. En pocas palabras, se trataba ni más ni menos, de tomar la difícil decisión de escoger entre el pico, la pala o el hacha.

No fue hasta años más tarde, en la conocida Alta edad media, cuando un extraño forastero arribó a aquel pequeño pueblo.
No tenía nada de especial, solo era un hombre con una mochila de amarre, una camisa arrugada de un ligero color crema, unos pantalones marrones con parches en las rodillas, y unos zapatos que denotaban el largo andar del hombre. En cuanto a su físico, no era nada del otro mundo, ojo café, pelo castaño... Solo una característica llamativa; una prominente cicatriz que pasaba por lo largo de su frente, bajando por su ojo derecho terminando en su mentón, no sin antes navegar por sus gruesos labios.

No sé pronunció, de hecho, los primeros días en que el hombre se quedo viviendo en el pueblo, todos creían que era mudo, un hombre que se había quedado para vivir en la inexistencia absoluta.

-"He escuchado que es un rey desterrado de su tierra y ha venido a buscar suerte"
-"Apuesto a que solo es un ladrón más que ha venido a quitarnos nuestras cosas, no es ni será la primera vez que ha de pasar"
-"Un mudo ha llegado al pueblo, vaya mal augurio hemos tenido, deberíamos hecharlo, no les jode?"
-"Y si solo está "perdido"?"
-"Y su cicatriz, la habéis visto?, Seguro es la marca del demonio"

Murmuraban los pobladores.

Una tarde el hombre se quedo observando en lo alto de la casa, con cara de duda y de no entender nada sobre el paradero de las 2 prometidas montañas.

-"Eh, tu, el de ahí abajo... Qué hacéis cuando os aburris" - Dijo el hombre.

-" m m m m m" - Titubio el joven -"Acaso me habla a mi?... Puede hablar?".

-"Claro que puedo hablar idiota, si no por que tendría boca?" - Exaltó el hombre.

-"Bueno, esque lleva días desde que llegó al pueblo y nadie nunca le ha escuchado hablar. De hecho, se rumorea que es un hombre muerto que ha venido p...."

-"Calla de una vez, hablas mucho y no he escuchado aún mi respuesta, qué hacéis cuando os aburris?"

-"Bueno, yo suelo talar árboles, todos los días me levanto desde temprano buscando el roble más grande y robusto para hacerlo caer."

-"Y eso es divertido acaso?, Ver caer un árbol?" - Dijo el hombre con ironía.

-"Bueno, también está el lodo o las minas, he escuchado que son muy divertidas. Un amigo me ha contado que ahí puedes encontrar hermosas pie...".

-"Joer como hablas hombre. Qué clase de pueblo es este?. Enserio me harás escoger entre el pico, la pala o el hacha?".

-"Bueno, es lo tradicional. No sé me ocurre nada más".

-" No conocéis la espada entonces?" - preguntó el hombre.

-"La que?..." - dijo el joven.

-"Ya veo, no sois más que un pueblo minero. Vaya lugar he venido a caer".

-"Señor, si no le molesta, que es eso a lo que usted llama espada?"

-"Si en verdad quieres saber, has de traerme aquel arbol lejano justo al lado del lago" - Dijo el hombre mientras apuntaba con su largos dedos. -" Ah, y has de traermelo sin cortarlo en absoluto, necesitare también su raiz".

Debe estar loco. Pensó el joven.

Con el pasar de los días y las horas, la duda carcomia al joven. _"Que es una espada?, De dónde vendrá?... Por qué tiene una cicatriz?". Se preguntaba el joven.

No fue hasta el tercer día, cuando decidió ir a por aquel árbol. No fue una tarea nada fácil, se levantó más temprano que de costumbre y hasta que se acostó el sol, excarvo para sacar el árbol desde raíz.

-"Eh, aquí está el árbol... Me ha costado la vida el sacarlo. Un poco más y me fracturó la mano". Mientras le arrastraba. -"Más vale que tú historia valga la pena". Gritó el joven a la ventana del hombre.

-"Historia?. No muchacho... Mi vida. Las historias son para los cuenta cuentos; Lo que saldrá de mi boca son hechos que he suscitado en el pasar de los años"

-"Vale vale, de dónde vienes?". Preguntaba el joven.

-"Que impaciente, el lugar será lo de menos. Si tanto quieres saber, empieza a guardar silencio y escuchar"

...

"Provengo del todo y de la nada. Para unos lo fui todo y para otros no fui nada. Algunas veces fui 2 personas a la vez y otras veces, nadie... Aunque siendo algo o no, jamás me borraran de sus mentes."

-"Eso no tiene sentido, qué clase de historia es esa?. Cuéntame sobre la espada". Interrumpió el joven.

-"Calla!, Si vuelves a interrumpir no diré nada más."

-"Vale vale, sigue sigue". Dijo el joven, sin entender el temperamento del hombre.

"Por muy grande que me veas, yo también fui joven como tú. Inmaduro, problemático y soso. Sobra decir tambien, que disfrutaba hacer lo mío, así como tú disfrutas de talar.

Vengo de una comunidad muy amplia y diversa, donde los habitantes suelen tener sus diferencias; siempre discutiendo por quien es el mejor en lo que desempeña.
La espada, es una herramienta muy útil así como tú pala; la única diferencia es que tú partes madera y yo partía egos...

Al final de todo, por muchas diferencias que tuviésemos, coincidíamos en una sola cosa... El mal trato, ignorancia y poca atención que tenían los reyes hacia su gente. Era algo que provocaba la ira y el abandono de la gente de aquella hermosa comunidad.

Los reyes tenían a un noble a su disposición, quien era vocero de estos. Ya que, por raro que suene, los reyes no hablaban nuestro idioma..."

-"Reyes?, Noble?... No estoy entendiendo del todo, que es eso de partir egos?. Preguntaba el joven desesperado.

-"Suficiente, has colmado mi pasiencia, regresa a tu casa y no vuelvas". Dijo el hombre.

-"Espera, no te vayas. Esta ves no volveré a interrumpir". Dijo el joven.

-"Si quieres que siga contando sobre mi vida, deberás ir a traerme otro árbol igual o más grande, desde la raíz. Mientras tanto, ADIOS!"

Al día siguiente, el joven fue por otro árbol aun más grande y mas pesado.

-"Ey!, Este me ha costado un dedo... He perdido mucha sangre, más vale que valga la pena, o el próximo dedo perdido será el tuyo". Gritó el joven nuevamente por la ventana del hombre con ira.

-"Has tardado demasiado... En qué me quedé?". Dijo el hombre.

-"Los reyes y el noble"

-"Cierto... El noble.
El noble era casi tan poderoso como los reyes, con algunas esepciones claro, ya que si bien podía hacer muchas cosas, siempre debía hacerlas siempre a la medida de los reyes. Cosa que disgustaba a la gente aún mas.

Este siempre fue serio y reservado, pocas veces se mostraba condolente.". Acto seguido, el hombre ríe -"Aunque por muy serio que era, siempre trate de ver el lado gracioso a la situaciones, incluso hacia enojarle.

Dentro de nuestra pequeña gran sociedad, existieron hombres con grandes hazañas. Colonizadores que habían conseguido hacerse de nuevas tierras y tesoros, algunos reconocidos y fanfarrones y otros no tanto."

-"Y tu pertenecías ahí?". Preguntó el joven.

-"No soy nadie para responder eso... Aunque se podría decir que si, estuve ahí, aunque por enojo de varios, se diga lo contrario.

Heramos una socoedad llena de luchadores con ganas de conquistar y saquear. Y como en toda comunidad, las diferencias individuales llevan a batallas internas y largas. Dónde nadie sale victorioso realmente, ya que las versiones cambian según la boca que las narra.

Para esto, el noble, tenía un grupo pequeño de consejeros, que se encargaban de mantener el control en la sociedad y hacer las dinámicas sociales, más entretenidas o bien, que se respetasen las reglas de los reyes al pie de la letra.
Muchos de ellos fueron grandes luchadores antes, algunos majos y otros tiranos.

Existía una pequeña divicion de conquistadores que se enfrentaban contra otros conquistadores, pero de otras regiones; todavía más lejanas y con culturas diferentes. Aunque de ahí pude aprender mucho a la hora de la batalla. El idioma era distinto, pero se compartía la ideologia de ser "el mejor conquistador".

-"Vienes de un mundo de mucho caos, no entiendo, y qué posición tomaste tu en aquella sociedad?, Qué tiene que ver eso con que me digas que es una espada". Dijo el joven.

-"Está vez me dejaste hablar más, pero has vuelto a interrumpir... Has de traerme 2 árboles esta vez, si es que quieres escuchar el resto".

Esta vez, el joven tardo 2 días en conseguir los mejores árboles. Pero una vez obtenidos regreso.

-"Ey!, Hombre... Me ha costado la mano... Adelanta y dime lo de la espada de una maldita vez"

-"Quien te crees para alzarme la voz?, Te he dicho que calles... Así que calla.

Yo decidiré hasta donde contar y cuando parar, entendido?".

El joven asentó con la cabeza.

"Unidos por defender nuestra comunidad, pero separados por defender nuestro ego. Así heramos nosotros en aquel entonces en ese pequeño y elitista grupo de luchadores.

Lo mas gracioso fue el inicio, ya que no siempre pertenecí a aquel grupo de conquistadores, muy por el contrario, solía tener enemistad con ellos la mayoría de las veces. Como comenté el primer día en el que viniste muchacho; los reyes, el noble y consejales, no siempre eran justos. Por lo que la corrupción y tiranía estaba presente, como en cualquier otra comunidad.
Fue ahí donde me hice esta cicatriz por la cual se me juzga a primera vista. Adaptarse o quedar en el pasado, tome otra forma y con ella enfrente a esa tiranía. Perdí amigos, entre otras cosas... Pero en el juego de la oveja, ser el lobo siempre será más divertido.

La espada amigo mío, es un arma de doble filo, hecha de hierro y forjada por los herreros, usada para asesinar a personas y con ellas, sus sueños, metas, aspiraciones, presente y futuro, dejando solo su pasado. Objeto del cual debes cuidarte, ya que muchas veces proviene de tu mejor amigo o tu peor enemigo.

Al final, ese sitio ha cambiado bastante y por ello decidí dejarlo.
Vine a este pueblo más tranquilo, dónde el tiempo no importa, al igual que tus actos, pues al no haber guerra, no se te señalará de otra forma mas que de minero.

Aquí he de morir, y si a alguien ayude o perjudique con mis acciones, ya será cosa del pasado."

El joven perdio la mano, otros el tiempo al escuchar la historia. Ya no importara en absoluto, ya que para muchos el hombre solo estara

l0st (Perdido).

Aguante Guerras Tribales, un abrazo ;)
 

Atlas

Lancero
Puntuación de reacción
955
Bastante bien la historia... Pero bueno hombre! Aprovechame que corto medio bosque para decir que esos arboles eran para construir tu ataud... Te quedo muy random lo de los árboles xD
 
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